Traducción del post de Jim Horton.Vladimir Putin está tratando de controlar una doble apariencia para su país y para el mundo.
Por un lado, envía soldados y armamento a Ucrania.
Por otro, hace un llamamiento para la creación de un corredor humanitario para las tropas ucranianas atrapadas en la lucha.
Sin embargo, cada día está quedando más claro que desea anexar por lo menos la parte oeste de Ucrania y hay muy poco que el gobierno de ese país pueda hacer en contra de ello a menos que obtenga armamento por parte de los países occidentales y lucha en contra de esta intención.
Parece que Putin quiere ser visto en Rusia como un líder compasivo, mientras que no le importan los sentimientos de los líderes de Europa y Estados Unidos.
Putin puede hacer esto por la indecisión de Occidente. Entre Occidente se preocupe más pero no actúe, es más fácil para Putin de seguir adelante. Entonces, esto le granjea una mala reputación en Europa y Estados Unidos, pero, ¿por qué tendría que importarle? Mientras que controle las líneas de gas a Europa y pueda cerrarlas a su antojo, puede debilitar cualquier acción en su contra.
Su idea de Relaciones Públicas es una fuerza coercitiva.
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